Parece ser que hay gente que se mete en este Blog para ver si me derrumbo, para meter presión. Oh, pobres ilusos. El murciélago se ríe mientras baila sobre vuestras cabezas, sí, allá arriba, a la luz de las farolas.
Pues hoy vais a tener más de lo que podéis digerir, mis queridos lectores.
Esta semana me tengo que poner serio. El escalofriante relato que voy a colgar es totalmente verídico. Aunque lo tengo terminado, he decidido colgarlo en tres partes. Por dos razones: porque no quiero que se os pare el corazón a media lectura, y porque es algo extenso.
Todo comenzó con la creación de este Blog y con la entrada de un siniestro personaje que se aficionó a mis cuentos (ya descubrirés quién). Sí, amigos, este blog me ha metido en muchos líos, y como leeréis, me ha creado enemigos muy peligrosos. No he querido confesarlo antes porque aún no me sentía preparado. Pero nadie callará al murciélago.
Así que os dejo con la primera parte de mi relato. Como siempre (ya conocéis como va esto), os dejo con un pequeño extracto para que os hagáis una idea. Luego si queréis seguir leyendo os descargáis el relato. Es gratis. Lo único que os pido es que, si os gusta, se lo reenviéis a un amigo.
Alla va:
Me alegra saber que aún queda gente que aprecia la grandeza de la buena literatura, y mucho más que te hayan gustado tanto mis relatos.
Gracias B.L.
Sólo espero que las editoriales terminen entrando en razón dándome la oportunidad que merezco.
Un abrazo.
Pero quise ser paciente. Me duché, salí a tomar algo con mi chica para contarle la buena nueva, cenamos en una pizzería. Y después, al llegar a casa, justo antes de acostarme volví a meterme en el Blog. B.L había respondido. Leí:
Tranquilo Sergi, todo llegará.
Torres más altas han caído.
B.L.
Dios mío, pensé, ¡voy a triunfar!..."
Balzac, Dumas, Victor Hugo, Dickens, Flaubert, Stevenson, Salgari y muchos otros popularizaron la literatura con sus folletines por entregas. A ellos debemos en parte el género novelesco tal y como lo entendemos hoy en día. Para bien o para mal.
Salvando las distancias, he querido hacer una pequeña aproximación al relato folletinesco. Aunque, por supuesto, no pretendo siquiera insinuar que me acerque al nivel de estos maestros.
El murciélago sólo pretende que la gente sepa la verdad. Que se sepa lo que he sufrido. Y en este cuento de no-ficción encontraréis esa verdad en cueros, como a mi me gusta.
La semana que viene, claro, continuaré con la segunda parte.
En caso de que no aparezca por aquí, os doy permiso para que denunciéis mi desaparición a la policía. Por que es imposible que no cuelgue...
¡UN CUENTO A LA SEMANA!
9 comentarios:
Muyyyy bueno, toy impaciente por leer la segunda parte.
Ya sabes que si necesitas ayuda tenemos contactos con la mafia siciliana.
Yo se el final!,lo vendo a precio de petrolio jejej! GRANDIOSO!
Un beso.
J.
la próxima vez escribe sólo una palabra!!! te habrás quedao agustito...estírate un poco como mínimo cuelga 1500 palabritas!!!
Muy bueno, aunque me haya costado un cierre de blog :p jajajaja
Eso si, que sepas que haré chantaje a J. (como si no se supiera quien es :p) para enterarme del final.
Y frau brujer tiene razón, hay que pactar un mínimo de palabras por semana, que cualquier día nos cuelgas un cuento monosílabo.
Por cierto, yo tambien habia escuchado lo de la leche.
Habrà que investigar
Que bonita historia de amor. Eso sí, me he perdido un poco. Con lo de escribir en el blog quieres trasmitir un mensaje de sublimación de lo ocasional, o simplemente un exhaltación de lo meramente humano?
Ah¡ y lo de la leche que caduca es una métafora de la vida, verdad?
Espero que al final se descubra quien asesina a tu tía
En fin, es que en el limbo se aburre uno mucho
Vuestro siempre,
Fofo
PD:
Os advierto, no entreis en las zonas oscuras
Pues la verdad es que pretendo más bien sublimar lo meramente humano, exhaltando lo acasional. Ya ves que siempre lo entiendes todo al revés, amigo Fofo.
Por cierto, respecto a tu nombre. ¿Hace referencia a "fofo", de grasa bamboleante y carnes flácidas, o al pallaso de la tele (en ese caso llevaría acento)?
Yo creo que te pega más bien lo segundo.
En todo caso, como sé quién eres, fantasma de Fofó, te agradezco que entres a saludar a tu viejo amigo el murciélago, compañero de tantos disparates literarios, aunque últimamente no me regales con ninguno.
Un abrazo, fantasma!
CUIDADOOO!!!no salgas a la calle tienes una manada de zombis esperando la segunda parte de: TERRORISTA NO, CUENTISTA (PARTE II). Has creado una epidemia, tio suelta el antídoto YAAA! O crearás un desastre social y natural. Evacuación, aislamiento total. DESTRUCCIÓN, LOCURA PERMANENTE, IDIOTEZ EN SU MÁXIMO ESPLENDOR!
J.
Creo que deberías dejarlo.
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