lunes, 20 de abril de 2009

RELATO 46: "¡QUIERO SER PERDIZ!"

Buenas noches, amigos del murciélago.

Si la semana pasada os ofrecía uno de los primeros relatos que conseguí que me ilustraran (gracias de nuevo, Roger), esta semana volvemos a la carga.

En concreto, hoy, además del relato de la semana, podéis disfrutar de una maravillosa ilustración de David R.

Hace ya algún tiempo que invité a todo aquel que quisiera aportar una ilustración, un dibujete, o una fotografía que ilustraran mis relatos, a no cortarse. Y he aquí la primera colaboración.

Debido a mi interés por el mundo de la imagen (cómic, ilustración, fotografía), he ido agregando links a mi blog, hasta atesorar una buena colección de artistas gráficos entre mis favoritos. Unos viven de ello, con mayor o menor fortuna, otros están empezando; los admiro a todos.

En cuanto a David R, me enamoré de la primera ilustración que vi. Resulta que David es fan de Calvin & Hobbes, y que yo, casualidades de la vida, creo que Bill Watterson es el mejor artista de tiras cómicas de la historia del cómic. Así que, cuando encontré el pequeño homenaje que le hizo David, no pude evitar una sonrisa (¿quieres verlo?, pincha aquí: CALVIN & HOBBES por David R).

Os recomiendo que entréis en su web. Seguro que la encontraréis divertida:


Y dicho esto, vuelvo a lanzar la pelota:


TODO AQUEL DIBUJANTE, ILUSTRADOR O FOTÓGRAFO que quiera completar alguno de mis relatos con parte de su trabajo SERÁ BIENVENIDO. Su obra se colgará en este Blog y, por supuesto, ilustrará el PDF que vosotros, amigos del murciélago, descargáis cada semana. ¡QUE VIVA LA SIMBIOSIS ARTÍSTICA!


En cuanto al relato de la semana, sólo me gustaría decir que fue escrito en un mal momento y que el proceso creativo fue la mejor terapia que pude seguir. Se lo dedico, con todo el cariño, a mi abuelo y a mi prima, por aquel breve paseo en coche.

Ahora a leer:


QUIERO SER PERDIZ.



“Desde que me separé de Maria caí en un profundo desasosiego. Anímicamente me encontraba entero, pero comencé a padecer un insomnio pertinaz que afectó mi rendimiento en el trabajo. Probé con el yoga, pero me ponía nervioso; probé con la valeriana, pero me sentaba mal y pasaba las noches despierto (y con el estómago revuelto); incluso probé masturbarme desenfrenadamente a partir de las diez de la noche, pero nada.
Finalmente me diagnosticaron una crisis nerviosa cuando intenté agredir a mi jefe con un saca-grapas, y tuve suerte de que me concedieran una baja larga en vez de despedirme.
Después de probar con antidepresivos, que me aliviaron la depresión que no tenía, pero no el insomnio, mi terapeuta me aconsejó pasar unos días en el campo.
Así que cogí el coche, pisé el acelerador, y en cuatro horitas salté cuatro provincias […]”





DESCARAGA EL RELATO COMPLETO (PDF) PINCHANDO AQUÍ, Y ENVIASELO A TUS AMIGOS:


¡QUIERO SER PERDIZ!




Ahora, este murciélago os deja, no sin antes pediros que, si os ha gustado el cuento, lo remitáis por mail a vuestra lista de contactos.

Dejad vuestra opinión, sinvergüenzas, tanto sobre el relato, como sobre la ilustración. Yo estaré de vuelta en breve, con…

¡UN CUENTO A LA SEMANA!

martes, 14 de abril de 2009

RELATO 45: "LA CIUDAD: LA SONRISA DE LA MARIONETA"

Buenos días, amigos del murciélago.

Hoy, si me lo permitís, voy a hacer un poco de propaganda sobre mi trabajo como guionista de cómic (sí, ya sé que siempre estoy dandome bombo, pero si no lo hago yo ¿quién lo hará?)

Hace unos años publiqué mi primera novela gráfica, "BAJO LA PIEL" (Ed. Astiberri). El guión es, como ya he dicho, de un servidor, y está magníficamente ilustrado por mi buen amigo Sagar Forniés.




La idea era partir de los lugares comunes del género negro y jugar con la transformación de unos personajes, que un inicio parecen simples estereotipos totalmente planos, para irles dotando, a medida que avanzaba la trama, de una mayor profundidad.
Recordad, amigos narradores, que desde un argumento aparentemente previsible, la sorpresa es mucho más efectiva cuando se presenta al lector.

En "BAJO LA PIEL" publiqué también cuatro relatos, que intentaban profundizar en el mundo interior de varios de los personajes. El que os presento es uno de ellos. Se puede leer de forma independiente al cómic, o como complemento del mismo. Va acompañado de una magnífica ilustración, cortesía del gran dibujante, y mejor amigo, Roger Ibáñez (Jazz Maynard).

Así que este relato se lo dedico a SAGAR y a ROGER, por ese arte que les sale por los poros.



BAJO LA PIEL.
LA CIUDAD: LA SONRISA DE LA MARIONETA.


"Respiró profundamente tres veces, preparándose mentalmente para la prueba a la que se iba a someter a sí mismo, y se ajustó el nudo de la corbata antes de entrar. Tenía la obligación moral de conseguir lo que se había propuesto y para ello iba a necesitar toda su sangre fría, pero de eso Furillo andaba más que sobrado. Apretó un poco más las carpetas amarillas que llevaba bajo el brazo y entró, elegante y sobrio, en el despacho del señor alcalde.
El humo era denso. Cuatro de los seis concejales presentes, así como el alcalde en persona, saboreaban puros habanos. Furillo, que no dejaba fumar a nadie en su presencia, contuvo un carraspeo y se imaginó a sí mismo boqueando en busca de aire, como un pez que agoniza fuera del agua. Rápidamente desterró esa imagen de su cabeza, y ocultó su aversión tras una expresión pétrea y segura como una caja fuerte [...]"





DESCARGA EL RELATO (EN PDF) CLICKANDO AQUÍ, Y ENVÍALO A TUS AMIGOS:



LA CIUDAD: LA SONRISA DE LA MARIONETA




A la espera de terminar nuestra segunda novela gráfica ambientada en el universo de "BAJO LA PIEL", espero que disfrutéis la lectura. A lo mejor, alguno de los que aún no ha léido el cómic, se atreve con un medio que, poco a poco, va ganando adeptos.

Y ya sabéis, si os ha gustado, tenéis mi permiso para enviar el pdf del relato a todos vuestros amigos.

Os espero aquçi de nuevo, muy pronto, con...

¡UN CUENTO A LA SEMANA!

miércoles, 8 de abril de 2009

BOLA EXTRA: "EL HOMBRE DEL AVIÓN"

Buenos días, amigos del murciélago.

Esta semana, vuestro cuentista favorito (que yo lo sé) se va de puente, cámara en mano y luciendo una enorme sonrisa, dispuesto a visitar el país de aquellos honorables herejes que eran "los Cátaros".

Para esta Semana Santa, comparto viaje hereje con dos "pelínkanos" y un hamster de diminutas manos rosadas. Todos estamos ansiosos por que llegue nuestra pequeña escapada animal.

Así que no pensaba colgar ningún relato, tomarme la semana libre. Pero como es SEMANA SANTA, me he dicho: "¡Me cago en Dios, algo tienes que regalar a tus lectores!", y a continuación me he santiguado.

Por lo tanto, sin que sirva de precedente, hoy repetimos cuento. Se trata de un micro-relato al que tengo mucho cariño y que viene estupendamente para estas fechas sacro-santas.

Los que ya lo habéis leído podéis volver a probar, los que se han incorporado ultimamente pueden disfrutarlo por primera vez.

Si os ha gustado, ya sabéis lo que os pido a cambio, amigos del murciélago.: descargad el relato en PDF y enviadlo a todos vuestros amigos.

AHÍ VA:


EL HOMBRE DEL AVIÓN.



"La primera vez que fui a la escuela le pregunté a la maestra quién era aquel señor que estaba colgado de la pared, haciendo el avión.

Se formó un buen alboroto y llamaron a mi madre para que hablara con el director, Don Nicolás. Yo estaba aterrorizado, y aunque no sabía qué había hecho exactamente, sí sabía que a la fuerza tenía que ser algo malo, porque si no los mayores no pondrían esas caras ni gritarían tanto. Cuando llegó mi madre y le explicaron lo ocurrido yo estaba al borde del llanto.

Pero a ella le debió parecer muy gracioso porque se empezó a reír, y recuerdo que me pareció la risa más hermosa del mundo. Desde aquel día, cada vez que veo un crucifijo, me parece escuchar la risa de mi madre.

Y siempre me pregunto por qué carajo el hombre que hace el avión no tiene pelos en los sobacos".





DESCARGA EL RELATO (EN PDF) CLICKANDO AQUÍ, Y ENVÍALO A TUS AMIGOS:








Ahora voy a documentarme un poco sobre mis mini-vacaciones por tierras herejes.

Pero estaré de vuelta en unos días, con...

¡UN CUENTO A LA SEMANA!

miércoles, 1 de abril de 2009

RELATO 44: "PROFILAXIS"

Buenas noches, amigos del murciélago.

Una semana más con vosotros, para tratar de ofrecedros un pedacito de ficción que pueda ayudar a comprender esta realidad nuestra de cada día.

Hace bien poco hablé cobre culpa y autocompasión, y creo que el relato de esta semana nos viene que ni pintado.

La bondad de la gente corriente es algo tan indiscutible como todas sus pequeñas mezquindades. "Somos una mezcla de pecado y santidades", que dice la canción.

Sin embargo, el ser humano se enfrenta a varias tragedias a lo largo de su vida. Una de esas tragedias es la certeza de la muerte, ya sea la propia o la de un ser querido. Es entonces cuando la autocompasión florece, y si no hay control puede desbocarse. Cuando eso sucede, algunos afrontan la situación con crueldad. En definitiva, alguien tiene que pagar por la injusticia que estamos sufriendo; quien sea, menos nosotros mismos.

Ese proceso de transformación en las actitudes, esa reacción inesperada ante la adversidad, es el tema de este relato.

Antes de empezar a leer, quisiera avisaros de que lo escribí deliberadamente con un estilo frío, aséptico, cercano al naturalismo, para no tomar parte en el asunto y dejar que la situación hable por sí misma.
Por el tono y el tema, entiendo que no guste a todos. En todo caso, yo quedé satisfecho con el resultado, y os lo ofrezco como siempre, con esa mezcla de orgullo y humildad que caracteriza a vuestro murciélago favorito (favorito después de Batman, claro).

Dejad vuestras opiniones.


PROFILAXIS



"Nerea dejó atrás la consulta y cruzó la calle pensando en todas las cosas que le gustaría hacer. Repintar las paredes, colgar los cuadros que guardaba en el armario del recibidor desde hacía meses; salir un martes por la noche para escuchar algo de música en directo en un garito oscuro y lleno de humo (y no regresar a casa sola); aprender a tocar el piano; cantar y bailar en una biblioteca hasta caer rendida; comprarse unas gafas de sol y un anorak grueso, resistente, profesional, y hacerse el transiberiano desde el principio hasta el fin; dejarse crecer el pelo y hacerse una trenza gruesa, brillante, y no rendirse a las tijeras hasta que las puntas abiertas rozaran el punto exacto donde termina la espalda y comienza el culo; tocar “moon river” desde el balcón y dejarse admirar a la luz de las estrellas; terminar de una vez todo lo que había dejado a medias. En eso pensaba, sí. Sin embargo se limitó a coger el 46, a ponerse los auriculares de su mp3, y a subir el volumen a tope, para no tener que oír los acelerones del motor, ni los cláxones, ni las discusiones estúpidas del resto de pasajeros [...]"




DESCARGA EL RELATO COMPLETO (PDF) CLICKANDO AQUÍ Y ENVÍALO A TUS AMIGOS:


PROFILAXIS




Espero que os haya gustado. Si es así, enviadlo a todos vuestros contactos a través de mail.

Ahora vuestro amigo de alas escamosas os va a dejar. Probablemente cene un par de insectos voladores y se ponga a leer hasta que le entre sueño. La cita con Morfeo no se hará esperar.

Y si de esperar hablamos, os espero aquí muy pronto, ya sabéis, con...

¡UN CUENTO A LA SEMANA!